jueves, 8 de diciembre de 2016

OBJETIVO:


Que el público en México disminuya notablemente su asistencia a ver películas estadounidenses.

RAZONES:

+ Porque el exceso con que el cine gringo se impone en México (más del 90% del tiempo de exhibición), producto de la corrupción y de prácticas monopólicas, limita el acceso a nuestros valores y cultura nacionales y a los de otros países del mundo.


+ Porque impide la creación de fuentes de trabajo en el país.

+ Porque los ingresos de los productores estadounidenses, de los distribuidores y gran parte de los exhibidores en las taquillas mexicanas, en vez de reinvertirse en México, se los llevan fuera del país.

+ Porque el capítulo de cine del TLC es leonino contra México y da por resultado una balanza comercial intolerablemente inequitativa...


HAZTE SOLIDARIO POR MÉXICO AYUDANDO A DIFUNDIR

Realicemos memes y videos, dirigidos a diferentes segmentos del público, y hagámoslos virales en las redes sociales.

Cuidemos que el objetivo que logremos sea el de disminuir notablemente la asistencia a las salas que exhiben películas y programas estadounidenses.


 


DESOBEDIENCIA CIVIL

Como las amenazas de Trump, la Ley Federal de Cinematografía y el TLC son injustos, este boicot llama a resistirnos, a desobedecer, a rebelarnos.

Este tipo de manifestaciones ciudadanas, están muy lejos de ser consideradas comunistas. Todo lo contrario, son profundamente democráticas. La India y los mismos Estados Unidos, no serían lo que hoy son, sin este tipo de expresiones sociales.


EN 2016, SÓLO EL 8.6% DE LA TAQUILLA TOTAL EN MÉXICO, CORRESPONDIÓ AL CINE MEXICANO.


Canacine, pronosticó que en el 2016 se vendieron cerca de 327 millones de boletos, con un ingreso bruto en taquilla de $15,018 millones. 

Con estos números, México es el cuarto país en el mundo con más boletos vendidos; sólo detrás de India, China y Estados Unidos, que tienen más habitantes que nuestro país.

Sin duda, México representa un gran negocio para la industria cinematográfica estadounidense, y para el duopolio mexicano de la exhibición que opera con escandalosa impunidad.



SERÍA UNA LOCURA NO APOYARLO


¿UNA CONTRADICCIÓN RECHAZAR LA XENOFOBIA Y APOYAR EL BOICOT CONTRA EL EXCESO DE CINE GRINGO?



El diccionario de la Real Academia Española define a la xenofobia como fobia a los extranjeros. Y a la fobia, como aversión exagerada a alguien o a algo, o como temor angustioso e incontrolable ante ciertos actos, ideas, objetos o situaciones, que se sabe absurdo y se aproxima a la obsesión.



De ningún modo, nuestro boicot contra el exceso de cine gringo es un acto de xenofobia. Por el contrario, rechazamos la xenofobia del presidente Trump al imponernos su muro y, no por ello, nos contradecimos al promover el boicot. ¿Por qué?



Porque el boicot no propugna por una aversión irracional a lo extranjero, y mucho menos por el odio a las personas extranjeras. Pero ello no significa que apoyamos todo acto que realice cualquier persona o nación, sea de donde sea.



El boicot no es contra los gringos por el solo hecho de serlo. ¡No! Es contra las prácticas económicas y culturales que su gobierno y, en este caso el sector más fuerte de su industria cinematográfica, nos imponen en forma invasiva, avasallante, sin respetar nuestras leyes y mucho menos nuestros valores y costumbres, avasallándonos mediante su poderío económico capaz de someter, mediante la corrupción, a nuestras autoridades y a un sector de la iniciativa privada que sólo atiende sus intereses personales y no el bien común.



De modo que seguiremos elevando la voz por un:



NO A LA XENOFOBIA.

SÍ AL BOICOT CONTRA EL EXCESO DE CINE GRINGO.